Los de Russo se habían puesto en ventaja dos veces por los tantos de Módica y Heredia -en contra-, pero el local se terminó llevando los tres puntos.
En un duelo con todos los condimentos, Argentinos le ganó 3-2 a Rosario Central, que estuvo dos veces arriba en el marcador.
Los futbolistas de Argentinos y de Rosario Central les regalaron un partidazo a los miles de hinchas del “bicho” que soportaron el intenso frío de la noche en La Paternal. La valentía merecía recompensa y unos y otros se entregaron al máximo. El local jugó mucho mejor, pero el visitante fue efectivo al extremo en la vibrante etapa inicial.
Miguel Ángel Russo optó por una línea de 5 defensores para contener a los 3 atacantes que utiliza Pablo Guede. Las intenciones de la previa se hicieron realidad en el primer tiempo: el local monopolizó la tenencia en más de 70 por ciento. Tal vez esas posturas se pronunciaron por el tempranero gol de Agustín Módica, que definió luego de un pase bárbaro de Lovera.
Todo el desgaste lo realizó Argentinos. Jorge Broun atajó bastantes, aunque nada pudo hacer ante un cabezazo furioso de Francisco Álvarez, luego de un córner ejecutado por Emiliano Viveros.
Leonardo Heredia se chocó la pelota después de un tiro libre de Lovera y en contra anotó el 2-1. Pero Carlos Quintana metió la mano adentro del área y Alan Lescano no falló desde el punto del penal para igualar en el último suspiro de ese cambiante primer tiempo.
El segundo tiempo fue igual de atractivo, aunque hubo menos emociones. Intentó el “canalla” plantarse unos metros más adelante y disputar la tenencia del balón. Así, el juego se hizo de ida y vuelta y con poco tránsito en el mediocampo.
Los arqueros, Rodríguez y Broun, siguieron atajando varias. El Ruso le tapó un mano a mano a Ignacio Malcorra tras una linda pared con Módica. Lo curiosos es que de esa acción salió una contra rápida (la primera vez que lo agarraron mal parado a Central) y Luciano Gondou la colgó del ángulo con un zurdazo desde 25 metros.
Russo movió el banco y metió a Jaminton Campaz, que entró con ganas. Módica estrelló un derechazo en el palo. Y segundos después, el travesaño le negó el segundo grito al zurdo Lescano.
En los instantes finales, Central metió en un arco a Argentinos, pero la defensa local aguantó. Y festejó con su gente.
Fuente: Clarín.
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